«Salimos del aula y el patio para enseñar desde nuestras casas»

La emergencia sanitaria y económica a nivel nacional por la pandemia del coronavirus llegó a cambios de paradigma en todos los ámbitos y la educación no fue la excepción, la suspensión de las clases presenciales ha obligado a buscar alternativas de enseñanza y la utilización de internet y sus plataformas digitales se han convertido en el aula educativo de millones de niños y jóvenes argentinos.

En los últimos días se han planteado desde gremios docentes algunas complicaciones con esta modalidad y se han conocido a través de los diferentes medios nacionales.

En Laprida la situación si bien esta siendo bien atendida y con un gran compromiso de trabajo del sector docente para llevar adelante la tarea educativa con sus alumnos en las aulas se ha tenido un mínimo reclamo que ha sido atendido y que forma parte de la utilización de un sistema educativo nuevo para todos.

Además de los reclamos públicos de la Feb, desde LapridaWeb pudimos conocer que desde CTERA a nivel nacional se realizó un planteo al ministro planteando la interconectividad y la de-terminación de horarios, una modalidad de enseñanza nueva que pone ante un desafío inmenso a todos y que seguramente tendrá su tiempo de acostumbramiento tanto para docentes como para alumnos y familias.

Según fuentes consultadas en Laprida hay unas pocas “quejas” del sector docentes, especialmente en el horario de entrega pero como contrapartida destacamos la enorme predisposición de los docentes para atender la demanda de sus alumnos.

Desde Suteba Laprida, al consultar al Secretario gremial Alan Olivera este nos contaba “tuvimos reuniones virtuales, ha provocado una sobrecarga docente y familiar, dejo mucho en evidencia empezar a conocer la familia de los alumnos porque nos estamos metiendo adentro de las casas, porque detectamos quienes tienen y quienes no computadoras»

«Esto dejo en evidencia la conectividad en los primeros años de secundaria, hace tres años que se cortó el programa Conectar Igualdad, por lo cual quienes están entre primero y tercer año no tienen computadoras otorgadas por el gobierno como derecho establecido, grupos que más repitencia y deserción tienen, lo que obviamente dificulta mucho más la tarea docente en este contexto y la familiar por la falta de computadoras” puntualizaba Olivera.

La docencia está dando muestras de un gran trabajo y solidaridad, atendiendo este momento y cargándose cuestiones como directores que están entregando módulos alimentarios y cuadernillos, el docente día a día, los equipos de orientación también, es un momento de aprendizaje, nos sacaron del aula y del patio para enseñar desde nuestras casas con nuestra cotidianidad, enseñanza en distintas casas y distintos momentos, nos va a dejar una gran enseñanza con muchas críticas y cosas por mejorar” finalizaba expresando Olivera.

Desde los organismos educativos a nivel provincial y municipal según fuentes consultadas no se han recibido reclamos por parte de la docencia pero entendiendo la problemática y buscando un equilibrio siempre respetando el trabajo de los docentes como también la necesidad de aprendizaje de los alumnos.

Desde la FEB Laprida, a través de su referente Luján Riviere confirmaron la existencia de reclamos por parte de algunos docentes «estamos a full, trabajando sin horarios», compartiendo el reclamo realizado desde la central al gobierno provincial a través de su presidente Mirta Petrocini “por un protocolo para docentes que cumplen continuidad pedagógica desde sus hogares, para establecer horarios concretos de trabajo. La hiperconectivad de los docentes a toda hora del día y la falta de horarios fijos, afecta la propia situación personal y familiar de los trabajadores y trabajadoras de la educación”